DOMINGO III DE ADVIENTO

Deben estar dos velas encendidas.  Iniciamos cantando ven, ven, Señor no tardes...

DOMINGO III DE ADVIENTO

ENTRADA:

Buenos días.  

Este tercer domingo de adviento se llama El domingo de la alegría.  Manifestemos nuestra alegría porque Dios está cercano a nosotros. Porque se nos anuncia el nacimiento del Salvador. Porque el Espíritu de Dios está con nosotros.  Porque Cristo el Señor se ha quedado con nosotros en la Eucaristía.  Y porque el Señor nos toma en cuenta para compartir la alegría a nuestro mundo.  Bienvenidos a esta celebración.

El sacerdote dice:

Repitan todos:

Todo hombre verá la Salvación de Dios.

Aleluya.  Aleluya

Nos alegramos, Señor, por tu próxima venida y nos alegra saber que Tú nos has llamado a la fe, para  ser luz de esperanza y gozo para nuestros hermanos.  Queremos consagrarnos hoy, como familia, a ti para animar a los hermanos desanimados o desesperanzados en sus problemas para que dándoles a conocer tu próxima venida ellos tengan el gozo de esperar en tí y gozarse en tí.

Ahora que encendemos esta tercera vela, queremos ser antorcha tuya para que brilles, llama para que calientes.  Ven, Señor, y sálvanos , envuélvenos en tu luz, caliéntanos en tu amor y que con el fuego de tu Espíritu compartamos el gozo de tu venida con los más cercanos a nosotros y con todos los hombres de buena voluntad. (y se enciende la tercera vela)

PRIMERA LECTURA:

El profeta anuncia razones para nuestra alegría.  El Señor tu Dios, tu poderoso salvador, está en medio de ti.  el se goza y se complace en ti.

SEGUNDA LECTURA: San Pablo nos invita a no inquietarnos por nada y a confiar en Dios siempre en nuestras oraciones.

EVANGELIO:  Juan Bautista nos recuerda que para recibir al Salvador debemos manifestarnos siempre con rectitud y justicia.

ORACION DE LOS FIELES

Confortados por el anuncio de la venida del Señor, oremos, hermanos, mientras esperamos confiadamente nuestra total liberación. Digamos confiadamente:
(R/. Ven Señor Jesús.) 

- Para que todos los pueblos de la tierra gocen de la paz que nos ofrece tu venida y tengamos progreso por la justicia y la caridad.
- Para que el Señor cure los dolores de los enfermos, anime a los tristes y cambie nuestras actitudes egoístas por la generosidad de corazón.
- Para que la alegría de encontrarnos hoy en tu casa, se multiplique en nuestro ambiente que ya anuncia tu presencia por la navidad.
- Para que las personas que convivieron otros años con nosotros en estas fiestas y ya han fallecido, puedan gozar ya de tu presencia por toda la eternidad.

Señor: que la alegría que sentimos por estar en tu casa y por la cercanía de tu Espíritu hacia nosotros, aumente con la celebración de la navidad de tu Hijo Jesucristo, que vive y reina por los siglos de los siglos.

MONICION DE SALIDA: 
Esta alegría que nos llena por estar en la presencia de Dios, en su casa, y por haber sido alimentados por su palabra y por la Eucaristía debe ser compartida a quienes nos rodean.  No olvides confiar tus oraciones y tus peticiones con confianza al Señor, que custodia nuestros corazones y nuestros pensamientos.
Digamos juntos: Bajo tu amparo...

Santa María de Guadalupe Reina de México....

Feliz domingo, feliz semana para todos.